Pedagogías desde y para la ruralidad: experiencias exitosas y replicables de rectores y docentes
A través de las visitas a establecimientos educativos ubicados en zonas rurales del país y conversaciones informales con rectores y docentes hemos descubierto una riqueza pedagógica pocas veces citada. Si bien existen publicaciones que sistematizan algunas experiencias, identificamos la necesidad de extender este trabajo y traducirlo a una serie de lineamientos que ofrezcan a los educadores de todo el país rutas de trabajo.
Estos lineamientos no son una receta mágica y por lo tanto no tienen un carácter prescriptivo. Han sido diseñados para que los miembros de la comunidad educativa, sobre todo los educadores, los apropien y en el proceso los enriquezcan. Su propósito es ofrecer herramientas que tanto rectores como profesores experimentados y en formación puedan cargar bajo el brazo para informar su práctica pedagógica del día a día.
A partir de la riqueza de la práctica pedagógica que la Fundación Compartir ha identificado a través del Premio Compartir al Maestro en los últimos 20 años, decidimos viajar a cinco municipios de Colombia para entrevistar y observar a seis educadores premiados.
Cada experiencia fue seleccionada a partir de dos criterios. El primero: que la solución planteada en la propuesta que los llevó a ser reconocidos por la Fundación Compartir pudiera ser adaptada y replicada en otras regiones del país con recursos similares. El segundo: que el conjunto de las propuestas reflejara las múltiples formas de ruralidad que existen en Colombia.
Durante tres días acompañamos a cada uno de los protagonistas de estos materiales en sus labores diarias. Durante los desplazamientos entre una escuela y otra, en los cambios de clase y al final de la jornada de trabajo realizamos entrevistas a profundidad. Estas trazaron las vivencias de los rectores y docentes —los participantes de este proyecto— desde una perspectiva que prioriza sus experiencias como estudiantes y luego sus trayectorias como educadores. En este último punto, hicimos énfasis en el surgimiento, evolución e impacto de la experiencia significativa premiada por la Fundación Compartir. En este contexto, de forma generosa y paciente, nuestros participantes contestaron preguntas como: ¿Cómo describiría su relación con la escuela cuando era estudiante? ¿Cómo era su relación con sus profesores? ¿Cómo inició su labor como rector/docente? ¿Cómo describiría la experiencia con la que se presentó al Premio Compartir? ¿Qué lo impulsó a desarrollarla? Las respuestas a estos interrogantes, entre otros, nos permitieron extraer las lecciones aprendidas y articularlas en estos lineamientos, que no tienen otro propósito diferente que el fortalecimiento de la práctica docente.
Si bien el Ministerio de Educación Nacional ha divulgado por diferentes medios insumos para potenciar la práctica pedagógica, este material que ahora presentamos no parte de las ideas que normalmente circulan en Bogotá, sino de las experiencias que rectores y docentes han desarrollado, probado y mejorado en el territorio. Con esta metodología buscamos invertir el ejercicio tradicional de diseño curricular y entregárselo a quienes mejor lo conocen: los educadores. La labor del equipo de investigación ha consistido en diseñar la metodología, documentar las experiencias, articularlas como material de formación docente y ajustarlas de acuerdo a la retroalimentación realizada por los rectores y docentes expertos.














